Carta Circular. La festividad mariana de la advocación de Nuestra Señora de Lourdes, que celebramos el 11 de febrero, enmarca la Jornada Mundial del enfermo, a la que los Santos Padres, desde San Juan Pablo II, nos han invitado a vivir eficazmente
A TODO EL PUEBLO DE DIOS QUE PEREGRINA EN LA DIÓCESIS DE MATAMOROS
¡GRACIA Y PAZ!
Esta jornada de oración por aquellos que viven una situación de enfermedad corporal, nos llama a la solidaridad, de manera especial, atendiendo sus necesidades más apremiantes, pero sobre todo a estar cercanos en su dolor y saber ofrecerles compasión.
La enfermedad, que en la experiencia diaria se percibe como una frustración de la fuerza vital natural, se convierte para los creyentes en una invitación a leer la nueva y difícil situación, en la perspectiva propia de la fe. De esta manera, a la luz de la muerte y resurrección de Cristo, la enfermedad no aparece ya como hecho exclusivamente negativo: más bien, se contempla como una visita de Dios, como una ocasión para provocar amor, para hacer nacer obras de caridad, para transformar toda la civilización humana en la civilización del amor (cfr. Mensaje para la I Jornada Mundial del Enfermo, San Juan Pablo II, 21 de octubre de 1992).
Es pues necesario poner nuestros ojos en aquellos que más nos necesitan y se encuentran en esta situación. El Papa Francisco en el mensaje para esta próxima jornada, nos invita a saber usar la sabiduría del corazón, para poder estar con el hermano, para poder salir hacia el hermano, para poder servir al hermano; esta sabiduría, que procede de Dios, nos impulsa a ser los “ojos del ciego” y “del cojo los pies”, tal como lo expresa el libro de Job (29,15), para encontrar nuestro camino de santificación y ayudar a aquellos que están en esta situación a conocer la misericordia de Dios (cfr. Mensaje del Santo Padre Francisco con ocasión de la XXIII Jornada Mundial del Enfermo 2015, 30 de diciembre de 2014).
Animados con estas palabras, preparemos esta jornada de oración de manera personal y en nuestras comunidades, teniendo como intención principal para la eucaristía de este día 11 de febrero a nuestros enfermos y a aquellas personas que dedican su vida a ellos. Visitemos a los enfermos, teniendo la certeza de aquellas palabras de Jesús: “Les aseguro que cada vez que lo hicieron con el más pequeño de mis hermanos, lo hicieron conmigo” (Mt 25,40).
Que Dios nuestro Señor nos permita seguir entregándonos por nuestros enfermos, que nos permita ser instrumentos de su misericordia para aquellos que más la necesitan, pero sobre todo que, en la situación de enfermedad, nos llene de su paciencia, consuelo y esperanza.
Aprovecho la ocasión para convocar a todos los agentes de la Pastoral de la Salud de la diócesis de Matamoros a que participen en el Encuentro anual que tendremos, Dios mediante, el sábado 21 de febrero en el gimnasio del Instituto Colón de la Cd. de Reynosa, Tam. Comenzaremos a las 9 am y culminaremos el evento con la Eucaristía a la 1:30 pm, para luego tener una sencilla convivencia y concluir hacia las 3 pm.
Dado en la Sede Episcopal de Nuestra Señora del Refugio de Pecadores, de H. Matamoros Tamaulipas, a los 6 días del mes de febrero de 2015, Año de la Interpretación de la Realidad Diocesana, y de la Vida Consagrada.
+Ruy Rendón Leal
Obispo de Matamoros