A todo el Pueblo de Dios que peregrina en la Diócesis de Matamoros ¡Gracia y paz!
En días pasados, les informaba que la salud de Mons. Martín Guerrero Reyna se encontraba delicada por una inflamación en el páncreas y de la intervención quirúrgica que tuvieron que realizar al detectarle un tumor en los ductos de este órgano.
El médico que lo está atendiendo nos señala que hace una semana Mons. Martín tenía un buen estado físico en el proceso post-cirugía, pero con un desgaste emocional y psíquico muy notorio; sin embargo el cuadro clínico se agravó con la presentación de una parálisis del intestino a finales de la semana pasada, debido a dos posibilidades: la primera, por una infección del páncreas documentada desde la cirugía y que ésta lo esté llevando a una fístula de las conexiones que se realizaron en la intervención, como segunda posibilidad. Añadido a esto, su desgaste emocional y físico por al ayuno prolongado que ha tenido ha sido más notorio. Durante la noche de ayer (14 de febrero) y hoy por la mañana se agravó su estado clínico por una falla renal aguda, parálisis intestinal y falla cardiaca, lo que, hasta este momento, ha tenido a los médicos en constante observación; su estado actual es de muy delicado. Sin embargo, este cuadro clínico puede cambiar si el intestino logra trabajar.
Mantengámonos unidos en la oración por la salud de Mons. Martín Guerrero, y pidámosle a Dios que nuestros enfermos, viviendo la pasión de Cristo, sepan ofrecer su dolor y encuentren la paz en Jesús, el Señor.
Dado en la Sede Episcopal de Nuestra Señora del Refugio de Pecadores, en H. Matamoros, Tamaulipas, a los 15 días del mes de febrero de 2016, Año de la Reflexión Doctrinal, y de la Misericordia.
+Ruy Rendón Leal
Obispo de Matamoros