Reynosa vivirá un momento histórico el próximo 3 de diciembre, con la elevación a Concatedral de la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe. Este importante cambio incluirá también la nueva denominación de la Diócesis de Matamoros, que pasará a llamarse Diócesis de Matamoros-Reynosa, marcando un nuevo capítulo para las comunidades religiosas de la región.
“Me pareció una idea muy brillante porque responde a lo que en realidad es la diócesis y a lo que representa la parroquia de Guadalupe en Reynosa”, expresó José Luis Cerra Luna, párroco de Nuestra Señora de Guadalupe”
Según el sacerdote, los documentos emitidos por la Santa Sede en junio, escritos en latín, contienen los decretos que conceden tanto el cambio de denominación como la elevación a Concatedral.
Aunque la iglesia de Nuestra Señora del Refugio en Matamoros seguirá siendo la catedral principal, la parroquia de Guadalupe, en Reynosa, se convertirá en una extensión que brindará identidad a los ocho municipios que conforman la diócesis. Este evento de carácter público y diplomático contará con la participación de representantes del Vaticano y autoridades civiles.
Entre los asistentes se destacan el nuncio apostólico en México, Monseñor Joseph Spiteri, quien presidirá la eucaristía, y el nuncio apostólico en Estados Unidos, Cardenal Christophe Pierre, quien anteriormente ocupó el mismo cargo en México. También asistirán el arzobispo de Yucatán, Monseñor Gustavo Rodríguez Vega y exobispos de la diócesis, como Monseñor Faustino Armendáriz y Monseñor Francisco Javier Chavolla.
“Viene también monseñor Margarito Salazar, un obispo que surgió de nuestra diócesis, así como el arzobispo de Monterrey, monseñor Rogelio Cabrera López”, agregó el párroco.
La ceremonia se llevará a cabo a las 12 del mediodía en Reynosa, considerada un día de fiesta para las comunidades de los municipios que integran la diócesis. Monseñor Rogelio Cabrera López extendió un mensaje a los fieles, señalando la relevancia de este acontecimiento: “Estaremos ahí con ustedes para celebrar el inicio de este cambio tan eclesial que el Papa Francisco ha autorizado. Allá nos vemos el 3 de diciembre”.
Con este nuevo nombramiento, la Concatedral también será sede de asuntos relacionados con el tribunal eclesiástico. Este órgano judicial de la iglesia católica resolverá procesos matrimoniales, disputas entre cofradías, conflictos patrimoniales y casos criminales de índole canónica.
“Es una gran oportunidad para que las comunidades de esta parte de la diócesis puedan realizar trámites diocesanos sin necesidad de trasladarse a Matamoros, especialmente en temas relacionados con el tribunal eclesiástico”, concluyó Cerra Luna”
Este cambio representa no solo un reconocimiento a la importancia de Reynosa dentro de la diócesis, sino también un paso significativo en la descentralización de las actividades eclesiásticas en beneficio de los fieles de la región fronteriza.
Víctor Guerra/ Texto e imagen